Si en el país menos democrático del mundo, que es USA, como todo el mundo sabe, la portada del "NewYorker" con una caricatura de Obama vestido como Osama en el despacho oval no es un problema para nadie, simplemente se ha considerado sátira, aquí deberíamos sentir vergüenza de que algo tan pueril como lo de los príncipes se haya convertido en algo parecido a una herejía. Nunca debimos haber perdido esa guerra, las consecuencias las seguimos pagando.
1 comentario:
Si en el país menos democrático del mundo, que es USA, como todo el mundo sabe, la portada del "NewYorker" con una caricatura de Obama vestido como Osama en el despacho oval no es un problema para nadie, simplemente se ha considerado sátira, aquí deberíamos sentir vergüenza de que algo tan pueril como lo de los príncipes se haya convertido en algo parecido a una herejía. Nunca debimos haber perdido esa guerra, las consecuencias las seguimos pagando.
Un abrazo y feliz verano.
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